Algunos funcionarios del Congreso de la República han manifestado temor de seguir laborando en las instalaciones del Legislativo, por cuenta de un presunto “duende” que estaría asustando a los trabajadores el tercer piso del Capitolio Nacional.
Hay otras personas que dicen que se trataría de un niño fantasma que deambula por las oficinas del Senado, cuyo espíritu ha sido visto incluso por algunos congresistas.
Según la senadora Gilma Jiménez, quien ya ha vivido en carne propia esta situación, se trataría de un “nomo” que asusta por las noches con algunos ruidos y molestas risas.
Sin embargo, otros aseguran haber visto a un pequeño de aproximadamente dos años de nacido, vestido de azul con blanco, caminando muy cerca de la oficina de la senadora Jiménez.
Lo cierto es que se había organizado una ceremonia de oración por los hechos que están sucediendo en el Congreso, pero el sacerdote encargado de precederla, al ver la presencia de los medios de comunicación, decidió suspenderla.
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