Marina Chapman, que vive hoy en día con su esposo en el Reino Unido, afirma en su nuevo libro 'The Girl with no Name' (La niña sin nombre) haber sobrevivido durante 5 años gracias a los monos capuchinos de su tierra natal en Colombia. Cuenta, Marina Chapman que cuando tenia unos 4 años de edad fue secuestrada y abandonada en una jungla. Sobrevivió gracias a la curiosidad de los monos capuchinos que se aproximaron a ella y la acogieron como parte de su grupo. Marina aprendió a imitar sus chillidos agudos y siguió sus costumbres alimentarias.
Cuenta que en una ocasión se enfermo después de haber comido lo que ella pensaba era tamarindo. Sufría de fuertes dolores de estomago. Uno de los monos, a quien ella llamaba el abuelo, la llevo al rio y le sumergió la cabeza en el agua. Ella comprendió que él trataba de incitarla a beber mucha agua, lo que le ocasiono vómitos que aliviaron su estado.
Los expertos afirman que los monos aceptan a seres humanos infantes en sus grupos. En 1991 encontraron a John Ssebunya, un niño de 6 años de edad en Uganda que había sobrevivido tres años bajo el cuidado de monos verdes; en 1996 encontraron a Bello, un niño de 2 años de edad, que había sobrevivido entre chimpancés en Nigeria. fuente 1
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